Y es que la vocación Salesiana no entiende de limitaciones territoriales, estragos en la seguridad publica o delincuencia juvenil. Tal es el caso de un grupo de jóvenes de una colonia no muy popular a las afueras de Lourdes, colon. En ese lugar limítrofe entre dicho municipio y San Juan Opico se vive una experiencia singular. Miguel Molina, Salesiano Cooperador de nuestra comunidad de Sonsonate. Realiza el trabajo pastoral de acompañamiento formativo para el grupo Juvenil REDES (Renovados del Espíritu Santo). "este grupo nace por iniciativa de una comunidad de Renovación Carismática de la jurisdicción de Ciudad Versalles... mi esposa, pertenece a la Renovación Carismática, a principio de año le llamaron del consejo de ancianos y ahí le encomendaron la coordinación de dicho grupo... ella me pidió ayuda para crear una guía formativa para estos jóvenes, y claro que sin pensarlo dos veces me puse a trabajar en dicha guía." Dos veces por mes, Miguel comparte con estos muchachos la formación en un espacio muy reducido, sin piso, techo de lamina, pero acogedor para dar estas formaciones: "la primera vez que compartí con mi esposa una misa en la comunidad quede muy sorprendido, porque la imagen que veía era ajena a la que estoy acostumbrado como pilares, santos, piso cerámico, grandes puertas de madera... fue algo distinto y que a la vez he aprendido a disfrutarlo con estos jóvenes".
Los jóvenes que se atienden realizan funciones en la parroquia de ciudad versalles (ahora en construcción) como: Acolitado, lectores e inmersos en algún curso de la misma renovación Carismática... "lo que me admira de estos jóvenes son sus iniciativas y su alegría de participar en alguna actividad... no le hacen mala cara a cualquier trabajo que les asignen en cualquier actividad parroquial".
Actualmente el grupo juvenil REDES, se encuentra en búsqueda de medios para recolectar fondos para el mismo grupo y ayudar a levantar la ermita en la comunidad donde viven: "pues ellos son muy astutos, en las actividades venden cosas sencillas, "churritos", "galletas", "fresco" etc... sencillas, pero que satisfacen su inquietud de querer colaborar"
La comunidad católica de la zona hicieron la solicitud al sacerdote que San Francisco de Asís fuera su santo patrono y así fue concedido, pero la inquietud Salesiana no termina ahí, ya que Miguel Molina desearía la pequeña donación de una imagen de Maria Auxiliadora "me gustaría que nuestra Auxiliadora hiciese el trabajo que hizo con Don Bosco, concederle el milagro de construir una iglesia y que en ella tenga un espacio"
Sin duda alguna este grupo juvenil en la zona donde vive su fé, representa una gota de lluvia en un mar de violencia...
